La Filosofía de la noviolencia, fue creada por el licenciado en Derecho Mohandas Karamanchand Ghandi.

Para Gandhi, la noviolencia, fue prácticamente un sacramento y el eje central de su mensaje en lo social, lo económico y lo político y también de su vida política, pública y privada, pues es el principio ético universal al que asocia el concepto de Satyagraha, palabra en sánscrito que significa, firmeza o amor por la verdad. En donde la verdad es Dios y el ahimsa es la acción sin violencia, una noviolencia física y moral que se hace extensiva a toda forma de vida y obliga a quien la practica a no dañar de ninguna manera a nadie (ni de pensamiento, ni de palabra, ni de obra), a amar a todo y a todos y a hacer siempre el bien, por tanto, ahimsa es, tal como señala José Antonio Reyna: Una disposición a amar y hacer el bien aún al que nos injuria.

Gandhi y la noviolencia

Gandhi, consideró a la filosofía de la noviolencia infinitamente superior a la violencia y sin límite en su poder, y al mismo tiempo, el medio que él tenía para llegar a Dios. De la noviolencia solía decir: “Que era su constante compañera, pues en ella encontraba la fuerza y el consuelo necesarios tanto para su búsqueda interior, como para su lucha en pro de la verdad y la justicia”.

 Fue por eso que atribuyó, tal como señala José Antonio Reyna en su libro “Gandhi y la noviolencia”: Una importancia capital a esta Ley del Amor, no solamente como medio para alcanzar la Verdad (a Dios mismo), sino como la única arma legítima y efectiva que un hombre puede usar en contra de la injusticia y el mal.

 Con respecto al Satyagraha, Gandhi dijo: “Satyagraha es pura y simplemente una fuerza de espíritu, y en la medida en que se deja abierta la posibilidad de hacer uso de las armas o de la fuerza física o de la fuerza bruta, en esa medida se disminuye la posibilidad para la fuerza del espíritu.  A mi modo de ver, ésas son dos fuerzas totalmente antagónicas y desde el primer momento tuve clara la idea de este antagonismo.”.

 Por esta razón, Gandhi estableció la filosofia de la noviolencia para sí mismo:

  • Como principio ético universal
  • Como acción social reivindicativa
  • Como actitud positiva hacia todos los seres
  • Como una actitud para comprender, amar y tolerar a todos los seres vivientes, incluyendo a la naturaleza  

De ahí su oposición radical a todas las formas de violencia y de guerra. De la noviolencia manifestó que era el primer artículo de su fe y también el último artículo de su credo.

Para Ghandi la filosofía de la noviolencia es:

  • Una fuerza que pueden usar los individuos y las comunidades
  • Una actitud ética de vida
  • Una resistencia con amor
  • La completa ausencia de mala voluntad
  • Una forma de vida que debe ser interiorizada
  • Una fuerza contra la violencia, la opresión, la tiranía, la injusticia, la desigualdad y el racismo.
  • En la vida del ser humano, lo que la luz es respecto a las tinieblas.

En la filosofía de la noviolencia, Gandhi exalta la reforma de la sociedad a través de medios pacíficos y didácticos, fue por eso que tuvo una influencia capital en el desarrollo del pensamiento pacifista del siglo XX.

Principios gandhianos de la filosofía de la noviolencia

  • Que la filosofía y forma de actuar del ser humano están condicionados por dos principios, el satyagraha y el ahimsa, y puesto que los dos tienen que ver con la verdad y la verdad es Dios, entonces estos principios son: «como las dos caras de una moneda, imposible separar una de la otra».
  • Que el ser humano consiga su libertad, para lograrlo es indispensable que aprenda a dominar sus sentidos y su espíritu, por tanto, la educación debe enseñar este dominio y el servicio a sus semejantes.
  • La educación moral y espiritual son básicas y se recomienda enseñar a los niños desde la infancia, la interiorización de períodos de silencio interno como parte de su vida personal, lo que se considera una manera de nutrir y regenerar al espíritu.
  • La educación debe de servir para armonizar las cuatro dimensiones del niño: su cuerpo, intelecto, sensibilidad y su espíritu.

Para educar al niño en la filosofia de la noviolencia, Gandhi señala como condición imprescindible, la coherencia entre los fines que se persiguen y los medios de que se dispone para lograrlo, ya que no es posible la realización plena del ser humano, si se niega la realización de los demás.

Gandhi tiene una concepción comunitaria de la educación por lo que señala que ésta no es responsabilidad sólo de la escuela, dado que considera que todas las personas con las que convive el niño son educadoras (la sociedad en su conjunto), por tanto, todos deben participar en su educación.

 

¿Cómo educar en la filosofía de la noviolencia?

Para educar al ser humano durante su vida en la filosofía de la noviolencia como coadyuvante en la construcción de una Cultura de Paz y noviolencia, desde la escuela escolarizada, se hace necesario que en los planes y programas de estudio de las diferentes etapas educativas se contemple introducir la enseñanza de los valores humanos que hacen del ser humano un ser ético, pulcro en sus acciones, incapaz de atentar en contra del bienestar de los demás, incapaz de atentar en contra de los bienes de los demás, entre otros, así como también, tal y como lo señaló Gandhi, la práctica de disciplinas que conlleven a la interiorización de espacios de silencio interno encaminados al establecimiento de la armonía física, mental y espiritual de cada quien.

Es importante aclarar que la práctica de estas disciplinas no tienen absolutamente nada que ver con ningún credo, religión, secta, etcétera, es simplemente una práctica encaminada a ayudar al ser humano en la armonización integral de su ser.

La práctica del silencio interno para armonizar integralmente al ser humano

El desarrollo de estos espacios de silencio interno, al mismo tiempo le aportarán un bienestar integral, para ello se sugiere la práctica de: la meditación trascendental china o del yoga, fundamentalmente en 2 de sus modalidades y practicándola alternadamente: Hatha-yoga (o yoga físico) y del Raja-yoga (o yoga mental), las que sin duda, poco a poco, irán permeando al ser humano en la práctica de la filosofía de la noviolencia.

Dicho lo anterior, pueden surgir varias preguntas que me apresuro a responder:

¿Cómo educar a las personas que ya no asisten a la escuela?

¿Cómo educar a las personas que no asisten a la escuela?

¿Cómo educar a los adultos?

¿Cómo educar a la población en general en la filosofía de la noviolencia a lo largo de su vida ?

Esta educación en la filosofía de la noviolencia, para todas/os a lo largo de la vida, se puede realizar/continuar a través de los medios masivos de comunicación –mass media– y también a través de las redes sociales, para ello será necesario que los gobiernos de cada país hagan los diseños correspondientes.

 

Noviolencia, en lugar de no violencia y no-violencia

El término noviolencia fue acuñado en los años 30 por el filósofo italiano Aldo Capitini, en su lucha contra la dictadura de Mussolini.

El objetivo fundamental de la noviolencia es el rechazo a la existencia de la violencia y también al uso y abuso de ella en todas sus formas por las razones que sean.

Para él, la noviolencia es un intento de construcción que renuncia a toda forma de violencia para conseguir La Paz.